A última hora del sábado, acordamos esta salida por
Collserola. Creo que nos está gustando ese puntito de incertidumbre sobre lo
que haremos al día siguiente. A pesar de que se planteó la cuestión, pasó todo
el sábado sin que hubiera claridad, no se si porque cada uno estaba
reflexionando sobre las votaciones al día siguiente, pero la realidad fue que
entre las 22:52 y las 23:33 nos decidimos: sería Collserola.
Así que llegó el Domingo y en la Plaza Mireia nos
encontramos Frenando, Jesús, Zezu y un servidor, que había venido pedaleando
desde casa, por lo que ya llegué al punto de encuentro listo para lo que fuere.
Como no había habido mucho tiempo de montar y reflexionar
sobre la ruta (a pesar del dia de reflexión), fuimos con una idea de lo que se
podía hacer y tomando decisiones como correspondía a un día de votaciones.
Comenzamos por hacer a trialera que sale de la entrada del Club de Tenis
Diagonal. Es una trialera muy sube y baja, ideal para reventar las piernas que
no has podido calentar porque te acabas de subir a tu burra. Zezu la adora…
Por allí llegamos al descampado de Can Cuiás, a unos 300 m
de altura, donde hicimos una pequeña pausa antes de continuar subiendo hacia
nuestro primer destino, una trialera situada en el cruce de Can Castellvi a Can
Balasch. Strava no la tiene identificada, así que la dejamos como la Desconocida.
En la subida, Frenando vio las estrellas en plena luz del día, cosa que no
pintaba bien. Un resfriado, las fiestas, no sabemos qué, pero su cara estaba un
poco estrellada ;). La Desconocida es una trialera que parte de los 422m y cuando
pensabas que todo era bajada, sube un poco más hasta los 455. A partir de allí,
baja de sopetón hasta los 337m por una zona de bosque bajo y tierra húmeda.
Zonas de buena pendiente, buenas para trabajar con el freno delantero, lo único
que podía contra la pendiente de -26%.
Al llegar a la pista, Frenando ya tenía otra cara. Estaba
como poseído por las fuerzas oZcuras y no tardó mucho en ponerse nuevamente en
marcha para volver a subir por la misma pista camino a la Dragonkan, nuestra
segunda trialera del día.
En la Plaza del Dragón nos hicimos la correspondiente foto y
volvimos a ponernos las protes para atacar la trialera. Hicimos una pequeña
pausa en la variante que le puso titanio en el hombro de nuestro compañero
Karlos. La vimos desde arriba y continuamos la bajada. En uno de los puntos
chungos de la Dragonkan, Zezu quiso tomar una muestra de piedra utilizando su
plato grande, cosa que causó algún inconveniente cuando pedaleaba, pero que fue
rápidamente remediado con un par de hostias. Después del realizar el inesperado
mantenimiento, seguimos trialera abajo hasta alcanzar nuevamente descampado de
Can Cuiás. Frenando, en pleno estado oZcuro, hizo un último drop en posición
sentado que solventó como todo un crack!
De ahí fuimos por trialera hasta el Turó Rodó para buscar
otra que mientan Missy Giove, una trialerilla rápida con algunas piedras y un
árbol convenientemente situado para poner a prueba los reflejos. Una vez
completada la Missy Giove, apuntamos a la HP (por Hija de Puta), una trialera
con piedras, escalones y demás cosas por las que debo entender deriva su
nombre. Muy divertida, pero necesita hacerla al menos un par de veces para
sacarle más provecho, porque sino puedes darte con su nombre de cara.
Completada la susodicha, pusimos rumbo hacia la Plaza Mireia
bajo la promesa de que en el chiringo podríamos bebernos una o dos birras para
completar la salida de acuerdo a los cánones PanZetas. Y así fue.
Completada la hidratación, apareció Juanjo con su Banshee. Nos
saludamos y despedimos; y Juanjo y un servidor hicimos alguna cosilla más,
Juanjo hizo alarde de sus capacidades técnicas en un drop que yo ni imaginé que
se podía hacer y seguimos hacia Barcelona para cumplir con nuestras
obligaciones del día. El resto del grupo puso rumbo a Mollet y colorín colorao,
aquí se ha acabao.