diumenge, 14 de juliol del 2013

VALLNORD BIKE PARK



Vallnord ¡¡ALU-ZINANTE!!

Escapada a un bikepark, la primera para algunos y la segunda para otros, con pernoctación incluida para aprovechar mejor el tiempo y tener una "convivencia" de grupo. Muy buen rollo y mejor sabor de boca para todos sin excepciones. Una experiencia 100% adrenalina difícil de explicar hasta que uno mismo lo vive. Con la crónica intentaré que os hagais una idea de lo mucho que ocurrió pero, ya os aviso, esto va a parecer "el Quijote". Los videos irán más lentos e intentaré dejar aquello que tenga un interés "ciclista" o muestre el ambiente. Creo que resultará gracioso. Puede que a alguien le parezca la "historia interminable" pero creo que a los participantes traerá muy buenos recuerdos y gustará a los que no pudieron venir. Lo haré por capítulos para que no tengais que esperar tanto.

Llegó el viernes y, a pesar de los cientos de mensajes y conversaciones mantenidas, en el último momento había dudas de dónde nos reuníamos para salir. Yo quería mirar una cosa en el Decathlon y fuí con mi coche para dejarlo aparcado en Caprabo, el punto de reunión pactado, pero tras varios whatsapp terminamos reuniéndonos en el paki. ¡¡Qué raro!!

Troquel y Alfonso llevaban varias cervezas cuando llegué y, a los pocos minutos, aparecieron Fernando, Jua, Jorge y Chema. Dos minutos después llegó Karlitos con Ceporrillo. Montamos el aparatoso equipamiento de los 9 bikers y nos distribuimos por los dos coches (Frenando,Jorge,Jua y Zezu) y (Karlitos,Ceporrillo,Troquel,Alfonso y Chema). Yo había minimizado todo mi cargamento a mi mochila grande y la bolsa del casco pero la mayoría llevaba la mochila y una maleta con ruedas.

Comenzó la aventura dirigiéndonos hacia la autopista. El camino era largo y valía la pena pagar los carísimos peajes para llegar antes. Lógicamente, no sé nada sobre la conversación en el otro coche pero seguro que fué tan amena como la nuestra y con un tema principal (las bicis) y otro secundario no menos importante (las mujeres). Tal vez no fuera este el orden pero de ambos hablamos profusamente.

Por el camino, algún mensaje de Whatsapp (que todos desactivamos llegando a la frontera para evitar pagar roaming) y saluditos y chorradas por la ventanilla del techo que lleva Karlitos en su coche. Fernando no quiso ser menos y abrió la suya para corresponder en la misma medida a los que, en ese momento, llevábamos delante. Al terminar la autopista, Fernando se puso en cabeza pero el ritmo y el cachondeo continuaba. Casi en Andorra pasamos por una whiskeria con "farolillo rojo" y recibimos inmediatamente un mensaje diciendo que paráramos que ya habíamos llegado al hotel. Cachondeo general hasta que, poco después, llegábamos a un túnel cerca de Andorra donde a algún cabroncete (creo que Chema) se le ocurrió una broma pesada.

Por buenas carreteras y con dos conductores a los que les gusta pisar ibamos todo menos despacio y, al llegar a dicho túnel, en el coche de Fernando percibimos un destello extraño y un mensaje avisándonos de que el rádar nos había hecho una foto. Ninguno mirábamos hacia atrás y pensamos que era cierto porque, justo antes del túnel, yo había visto un límite de 50Km/h y no quise advertir a Fernando porque ya es mayorcito para saber lo que hace. Hablábamos sobre la putada de la multa y los pocos puntos que le quedaban a Frenando cuando Jorge le ofreció, llegado el caso, una solución (ya sabeis a qué me refiero) y yo también estaba en la misma situación. El capullo de Frenando dijo entonces "pues entonces puedo correr más".

Los pocos Km que quedaban fueron tranquilos y respetando todos los límites y, la verdad, amargos para nosotros. Cruzamos la frontera y llegamos pronto a la ciudad donde Frenando hizo gala de sus habilidades para perderse con el GPS. En este caso Jua tuvo algo que ver puesto que "ayudaba" con sus conocimientos de Andorra. Con la certeza de haber errado el camino, Frenando hizo un cambio de sentido (con maniobra porque la calle no daba) y dejó ponerse a Karlitos delante porque Alfonso era, sin duda, el mejor conocedor de la zona. También Alfonso erró en el camino y nos pasamos 1Km el túnel que nos llevaría al valle correcto y, finalmente, al hotel.

Nosotros seguimos comentando el extraño flash todo el camino. Yo decía que lo había visto en el interior del coche pero ténue. Todos estábamos de acuerdo en que había sido extraño y comenzábamos a sospechar que todo era una broma del coche de cola. En la puerta del hotel los muy cabrones bajaron del coche partiéndose de risa y preguntando por el rádar/multa. ¡¡QUE CABRONES!! Estaba claro que había sido una broma y nos relajamos, por fin.

Eran las 21h30 y sólo quedaba 1h para hacer el papeleo y cenar. El parking del hotel estaba completo, había poco aparcamiento en la calle y el restaurante del hotel cerraba a las 22h30. Descargamos todo el equipaje, fuimos a recepción a hacer el papeleo y despaché a Karlitos para que fuese a aparcar. Había dejado su coche en el paso de peatones y no quería más sorpresas. Fernando lo tenía en la zona de carga del hotel y fué a aparcar al terminar el papeleo mientras los demás subíamos el equipaje no sin antes sortear las habitaciones. Jua y yo dormimos juntos y los demás lo intentaron (dormir) en otra habitación triple (Karlitos,Ceporrillo y Rabanín) y cuádruple (Frenando,Chema,Alfonso y Troquel).

Bajamos rápidamente y, tras esperar unos minutos sin que llegaran los otros, los que allí estábamos (Karlitos, Jua, Ceporrilo,Rabanín y yo) nos fuimos a cenar. Nos apuntaron las habitaciones de todos y nos asignaron una mesa de 8 a la que añadieron otra silla. Mientras ya estábamos comiendo el primer plato (era un buffet libre) llegaban Chema, Troquel y Alfonso con una cerveza en la mano. Ellos estaban esperando en el bar y, al fin, cayeron en la cuenta de que había que cenar. Aunque el hotel tenía WiFi y algunos se conectaron a él, sólo en recepción había buena señal. De ahí que sólo enviáramos algunas fotos y mensajes durante la noche al grupo de la peña.

Cenamos a gusto, la comida no estaba mal, y bebimos hasta que nos "echaron" amablemente. Todos cenamos más de lo habitual y comentábamos que siempre pasa cuando vas a un buffet de ese tipo. Alfonso sugirió salir a dar una vuelta y tomar algo y, a pesar del frío (15grados en ese momento), nos fué bien para despejarnos. Casi todos ibamos de pantalón corto y manga corta e ibamos "encogidos" excepto Frenando y Jua que llevaban chaqueta. De camino al bar, paramos a mirar un par de tiendas de bicis ¿dónde sino?

Por fin llegamos al bar que Alfonso conocía, pertenecía al hotel donde él se había alojado en alguna ocasión, y nos sorprendió a todos sus dimensiones y calidez. Estaba decorado como una taberna inglesa y aquello tenía 500m2. Había 4gatos, la mitad giris, y tenía una mesa de billar y un futbolín donde algunos jugaron una partida tras sus cubatas/cervezas hasta que, también, nos echaron del garito. No entiendo esa prisa por cerrar de los lugareños más siendo esa noche la fiesta del "barrio". Oímos algo (poco) de jaleo de camino y se oía música a poca distancia de donde caminábamos pero el máximo apogeo, por no decir PUTADA, fué una especie de cabalgata a la 1 de la madrugada pasando debajo del hotel.

Llegamos al hotel, no sin antes volver a mirar la tienda de bicis, y nos despedimos con el cachondeo y comentarios sobre qué haríamos en la cama en nuestras respectivas habitaciones. Jua y yo lo teníamos clarísimo: separamos las camas y pusimos la mesilla enmedio. Fuimos al baño y a dormir. Jua cayó rápido pero yo tuve problemas para conciliar el sueño y estuve a punto de levantarme a ver qué pasaba en la calle. La comentada cabalgata molestaba pero parecía más un cabrón con el volumen de la música alto que una fiesta.

A la mañana siguiente, poco antes de las 8, estábamos casi todos en la puerta del restaurante tal y como habíamos quedado. Había que desayunar, pagar el hotel, coger las bicis, el forfait y el equipamiento para estar listos a las 10. La apertura de la estación. ¿Qué tal? Fué la pregunta general. Más cachondeo y algo de espera en la puerta del restaurante que no abrió puntual. Todos dormimos algo pero, por los nervios/excitación, la cabalgata y otros por los ronquidos ninguno pudo descansar del todo. Chema, el principal roncador, creo que es el que mejor durmió. Frenando llegó el último al buffet. Ya comenzábamos a estar preocupados por él cuando apareció con cara demacrada. No os podeis imaginar el careto que llevaba pero apenas pudo desayunar nada y estaba destemplado. Tomó un ibuprofeno y eso le ayudó a recuperarse de camino a la tienda de bicis pero sin la correspondiente energía del desayuno. Para más INRI, se había olvidado el pantalón de descenso y tuvo que usar el pantalón corto de calle porque nadie llevaba esas cosas de recambio.

EPISODIO II

Ya os he dicho que iba a ser largo. Si habeis llegado hasta aquí es porque os interesa y me alegro.

Aparcamos a pocos metros de la tienda y nos tocó esperar. Abrieron poco después pero no nos dejaron pasar mientras limpiaban o hacían algo. Por fin, pudimos entrar pero, a pesar de ser los primeros, nos decepcionamos un poco al ver que no podríamos llevar las bicis reservadas. Ya Frenando nos había avisado de que no les quedaban los modelos solicitados pero, al final, nos dieron las 7bicis que quisieron (Ceporrillo trajo una para él y otra para Jua). Hubo que repartírselas por talla pero, aún así, Jorge tuvo que rodar con una S cuando él habría ido más cómodo con una M. La Trek era mejor bici que la de la casa pero le costó adaptarse. Chema se sentó sobre ella y estaba dispuesto a llevarla pero puesto que mide 1,80 y Jorge 1,72 lo lógico era que Chema llevara la M. Sólo Karlitos llevaba una L y Alfonso se quedó con la "mejor" de todas: la Trek D88. Todas respondieron aceptablemente, aunque Frenando se quejaba de lo pesada que era su GT, excepto la mía a la que fallaba el freno trasero. Eso sí que fué descenso de alto riesgo. Al menos, en la tienda fueron amables y rápidos pero nos quedó algo de mal sabor de boca.

Eran las 10h25 y estábamos en la calle con toda la equipación puesta y nos hicimos las fotos de rigor para engrosar el extenso informe gráfico de la aventura. Nos subimos a las bicis y nos dejamos caer por la calle hasta el telecabina que había 200m más abajo. Una cola enorme de bikers con montones de bicis, calculo un centenar de ellos, rellenando el papel previo a la adquisición del forfait. Ceporrillo fué saludado por algún biker que conocía y que nos hizo el favor de pasar un boli: el cuello de botella era para rellenar el formulariocon una sola mesa y boli para todos. Repartidos en las 3colas que había después para pagar preguntamos todos por las condiciones del seguro que la mayoría contratamos. No estaba 100% claro si nos convenía pero lo lógico era que cubriera la asistencia en caso de tener un percance. Algo menos de 4euros que jodían pero casi todos preferimos pagar. En total 28,75euros de forfait contando con que 3euros te los devuelven al final de la jornada al retornar la tarjeta magnética que suministran.

Subimos con nuestras bicis por unas escaleras mecánicas, el único modo de subir al telecabina, y luego por unas escaleras a las que habían incorporado una estrecha rampa por la que arrastrar a nuestras monturas. Un pequeño rellano con una máquina que controlaba el forfait (lo recomendable era llevarlo en el bolsillo izquierdo del pantalón para no tener que sacar la tarjeta cada vez) y a esperar a nuestra cabina. Eran algo mayores que las de LaMolina y podíamos subir 3bikers con sus respectivas bicis. Nos repartimos y, por fin, comenzó la sesión. Aunque las cabinas casi paraban en el recorrido de subirse a ellas, el montarse con la bici vertical por una puerta más bien estrecha y organizarse en su interior era otra aventura por si misma.

Fotos en las cabinas, miradas cómplices y sonrisas en nuestras bocas. La alegría desbordante de todos era evidente y sólo Fernando, por su malestar físico que ya comenzaba a disiparse, se mostraba menos efusivo. Llegamos al final del telecabina, a media montaña, y repetimos fotos y compartimos más cachondeo. Estábamos que "nos salíamos" de alegría. Algunos estaban un poco acojonados pero ganas no faltaban.

Como hay que adaptarse a las bicis y sus frenos, algunos decíamos de comenzar por una pista azul. Karlitos decía que la Ruta66 (roja) era una buena pista para empezar y seguimos a Ceporrillo suponiendo que nos dirígiamos hacia allí. El ha estado en varias ocasiones en Vallnord y era, con diferencia, el mejor conocedor del bikepark. Bajamos por un senderito (nosotros a eso le llamamos trialera) donde algunos comenzaron a darse cuenta del pedazo de máquina que llevaban. Llegamos a un puente de madera que terminaba en un tremendo rampón de unos 10m con una pendiente del 40% donde yo tuve la primera "alegría" de quedarme sin freno trasero. No sabía lo que se me venía encima pero pensé en bajar por el telecabina a la tienda porque sin frenos no me veía capaz. Debo estar un poco loco porque seguí con el grupo aunque, al final, no tuve que usarlos mucho en esa bajada.

Paramos en el principio de una que Ceporrillo no conocía, mingitamos (para ser finos) y yo me percaté de que ponía CONTROL_1. Yo lo comenté pero de todos es sabido que NO ME ESCUCHAIS y tengo mi lado femenino harto ya. Comenzamos a bajar y a los pocos metros una rampa con piedras enormes, con surco enormísimo y raíces supergigantes con ostia descomunal garantizada convenció a los primeros a bajarla caminando. Yo insistía. Hice hincapié en que ponía CONTROL_2 pero ellos seguían para abajo. Algunos esperamos arriba mientras veíamos caminando metros y metros a los de cabeza. Chema y yo lo teníamos claro: nos vamos por la pista que eso es muy salvaje. 300m de pista más abajo nos volvíamos a cruzar con nuestros compañeros que todavía no habían podido subirse a sus bicicletas.

Como había una entrada de "las nuestras", la pista se separaba del grupo y parecía que la pendiente se reducía dije a Chema de unirnos al resto pero sólo fueron falsas esperanzas. Aquello resultó ser el trazado de la MegaAvalanche (campeonato del MUNDO) para el siguiente fin de semana. Algo más de una hora caminando por unas paredes verticales completamente embarradas y llenas de piedras y raíces que patinaban como el hielo. Poco podreis ver en el video de estos patéticos momentos pero, en el mismo instante que apagaba la GoPro, cayeron simultáneamente 4bikers. Con la excepción de la caída de Troquel y mi colisión con una valla de hierro terminando fué el único sitio donde hubo caídas y lesiones. Alfonso nos mostraba, tras vestirnos de nuevo, las moraduras que llevaba en las piernas de las múltiples caídas en esa zona.

Afortunadamente, llegamos a un salto (que en la tienda nos comentaron que hay que superar a más de 50Km/h para llegar al otro lado) que pasaba sobre una pista roja por la que pudimos "escapar". Tampoco fué sencilla pero pudimos hacerla montados. Un desastre que pronto olvidamos al descender por segunda vez. El final de ese recorrido pasaba junto a los coches y yo me fuí directamente a la tienda mientras el resto quedó hablando en los coches. Les expliqué las "dolencias" de la bici y cambiaron el líquido de frenos pensando que habría entrado aire. Algo de eso debía ser pero no lo único porque el freno trasero fallaba sistemáticamente cada 50m. Bajé el 30% del tiempo sólo con el freno delantero pero me sirvió para aprender que "se puede, se puede". Eso sí, bajaba más tenso/acojonado pero no quería perder el día en la tienda. Tenían allí una Mondraker Summum y les pedí que me la cambiaran pero me dijeron que también tenía alguna avería y que no estaba disponible. Ya no quedaban más que las averiadas. Una lástima porque, aunque más bestia, es muy parecida a mi Dune y me habría hecho mucha ilusión.

Insistí a los de la tienda en que se aseguraran de no contaminar el disco, ya he vivido también esa experiencia en el Puigmal y no me entusiasmó, y salimos fuera a darle con una manguera a presión y un spray al disco. Con gestos decía al resto del grupo que fuera subiendo, al fin y al cabo había que hacer algo de cola en el telecabina, pero esperaron hasta que terminamos unos minutos después. Finalizada la reparación, retomamos el asfalto hacia el telecabina todos juntos. No había las mismas sonrisas en las caras por el episodio de aquella negra negrísima pero la ilusión estaba intacta. Subimos a las cabinas de nuevo y nos relajamos con comentarios sobre lo negro de aquella pista ("negro recién salido de la cárcel" creo que fué el calificativo que usó Rabanín).

Saliendo del telecabina, Ceporrillo nos dirigió a la Ruta66. Eso era otra cosa. Tenía escalones y zonas técnicas, nada extremo, pero con muchos virajes y velocidad. Todos disfrutamos de ella y la repetimos en cada descenso hasta la base. Para mí la primera bajada fué la peor porque volvió el problema del freno trasero, lo que condicionaba mucho mi forma de bajar puesto que no podía correr tranquilo, y tuve algunas molestias en el cuadriceps izquierdo por lo intenso del tramo. La tarde del viernes todavía me dolía al tacto y temía que aquella fuera mi primera y última bajada pero, afortunadamente, no fué así.

Hicimos el tramo técnico final, similar a lo que hacemos por aquí, que nos llevaba hasta los coches para coger de nuevo el telecabina. Ahora ya íbamos todos contentos y no faltaron exclamaciones y gritos de júbilo durante esa primera bajada por la Ruta66. A mí, particularme, me gustó pero creo que salíamos más envenenados en LaMolina. Tal vez, por ser nuestra primera vez. Aquí había más variedad y, con la excepción de la negra, no había puntos críticos donde te jugabas el físico. Pero no os confundais, bajamos por unos escalones/raíces/piedras que fliparíais. Eso sí, en la confianza de que la bici haría su trabajo.

A mí no me gustaba cruzar la población ni los dos tramos de escaleras para coger el telecabina y preferia quedarme en la parte de arriba pero desde aquel punto no había más opciones. En la segunda subida (la primera no la cuento) pedaleamos un tramo para bajar por el woodpark. Más técnico que el de LaMolina y con alguna pequeña deficiencia pero apenas pasamos por la mitad de las rampas existentes por temor a lo que nos podíamos encontrar. Todo era nuevo para nosotros allí. De hecho, tras unos saltos parecidos a los que hicimos en LaMolina había tal pendiente que Jua derrapó y fué al suelo. Nada grave aunque tuvo que quitarse la tierra de los guantes después de hacer la "croqueta".

Un descenso entre árboles, con raíces, curvas y alguna que otra rampa que nos llevaron a un telesilla. Lo tomamos de uno en uno porque sólo había "percha" para una bicicleta (luego aprendimos otra forma de hacerlo) y nos reagrupamos arriba. Allí, aprovechando que el casco de Rabanín tenía un soporte de GoPro pegado, le pasé la cámara y así podría salir también yo en la película. Ya sé que me oís siempre (por lo que os quejais) pero a mí también me gusta ver cómo me defiendo. Los siguientes minutos de video fueron un monográfico sobre mí (no a petición mía) con un pequeño inciso de una rampa que saltó Ceporrillo mientras el resto nos limitábamos a mirarle. Por el video, acabo de enterarme de que Jorge tuvo una pequeña caída pero no me dí cuenta porque me envenené detrás de Ceporrillo bajando a saco tras el salto.

Llegamos a otro telesilla y lo tomamos. De nuevo de uno en uno. Era un descenso rápido con muchos saltos sin grandes complicaciones. Todos bajábamos bien y a ritmo los primeros metros pero en uno de esos saltos Troquel cargó mal el peso y cayó aparatosamente. A pesar de las muchas protecciones se hizo daño en el hombro por la fuerza con la que cayó sobre su brazo. Podría haber sido peor si Jua no lo hubiera esquivado a tiempo porque, según nos contaba después, estaba ya en el aire cuando cayó Troquel y llegó a tocar su rueda a pesar de que Troquel tuvo el acto reflejo de apartarse a un lado. Un par de minutos de parada para recuperarse del susto y retomamos el descenso. A partir de ese punto, Iván bajaba con miedo y se le notaba. No sólo eran sus molestias en el hombro sino que había perdido la confianza. Lo hizo todo y, más o menos, el grupo de 9 siempre bajó en pelotón pero a él le noté resentido aunque continuó con todos los demás. Incluso hizo un comentario afirmando no querer dejarlo e irse con mal sabor de boca. Tenía que desquitarse.

Ese tramo terminaba en la parte alta del telecabina y allí estaban parados algunos porque Ceporrillo había pinchado por llantazo. Mientras reparábamos el pinchazo aprovechamos a comer algo (barritas y unas patatas y frutos secos que llevaba) y también compramos un par de CocaColas. Yo tenía sed, cosa poco frecuente (aunque me "hidrate" abundantemente) y necesitaba glucosa en la sangre. Pretendía comprar, como ya he hecho otras veces, una naranjada y llevarla en el camelback pero no fuímos al súper porque Karlitos había traido una nevera con cervezas y cosas pero no tomamos ninguna. Al menos los de mi coche. A mí me resucitó porque ya notaba cansancio en las piernas.

Reparado el pinchazo y recuperadas parcialmente las energías nos dirigimos hacia otro tramo de woodpark. Ya llevaba de nuevo la cámara e iba "cambiando de culo" periódicamente. En este tramo seguí, básicamente, a Frenando que ya se encontraba bien de su malestar matutino. Bajamos un tramo divertido, como todos, hasta el telesilla que nos llevaba a la cima. Estábamos repitiendo y confiaba en que saldría bien y en que bajaríamos aún mejor conociendo ya el terreno. No hubo problemas, al menos que yo sepa, pero cometimos el error de ir despacio en un triple escalón de obligado salto. Por segunda vez, mi gozo en un pozo.

Seguía en esta ocasión a Chema. Si bien es cierto que bajaba prudente en más de una ocasión, como ese triple escalón, cumplió como un tigre. Yo pensaba que sería el más lento del grupo por su "perfil" y no fué así en ningún momento. En general, siempre fuimos como un paquete a ritmos muy similares pero manteniendo cierta distancia de seguridad. La alta velocidad lo recomendaba.

Repetimos todas las que habíamos hecho antes para mayor disfrute. Recuerdo preguntarle a Ceporrillo por novedades pero me decía que, a excepción de la negra, habíamos pasado por todo. La verdad es que resultaba difícil precisarlo porque, al contrario que en LaMolina donde las pistas van desde arriba hasta abajo, aquí eran recorridos de partes de la montaña y con más remontes.

Lo seguro es que bajamos y bajamos hasta quedar extenuados. Jorge ya hizo un par de paradas breves porque recordaba su caída de la semana anterior por bajar tan agotado. Otros hicimos lo mismo en uno u otro momento hasta que, ya abajo, la mayoría optó por terminar. A mí me quedaban ganas e iba preguntando a cada uno si se animaba a repetir. Finalmente, Frenando, Alfonso y yo subimos a hacer la última.

Cogimos el telecabina y bajamos por el woodpark hasta el telesilla que nos llevaría cerca de la cima pero todavía podríamos haber subido más. Yo quería aprovechar que los tramos altos son rápidos y no agotan tanto como la roja final pero Fernando no se veía con ánimo de bajar tanto y comenzamos el descenso desde allí. La batería de la GoPro ya se había agotado y no hay video del descenso pero os aseguro que es la más rápida de las bajadas que hicimos. Comenzó poniéndose Alfonso en cabeza, a mí me fallaban los frenos y las piernas en ocasiones y prefería ir el último para sentarme en ambos casos.

En el segundo tramo, la roja OldSchool, se puso Fernando en cabeza y siguió el "desenfreno". En mi caso literalmente. El ritmo era tremendo y en esas curvas tan pronunciadas es donde más se resentían mis piernas por lo que, llegando al final, les dije que paraba para descansar. Fernando, que antes afirmaba estar cansado, decía que por allí es por donde mejor lo llevaba. O el lo hacía muy bien o yo muy mal pero disfrutar, disfrutamos como cosacos.

En los últimos metros había ya mucho barro que salpicaba nuestros traseros y caras tras acumularse agua que bajaba por la montaña y varios pequeños chubascos que se sucedieron durante el día. Justo antes de llegar al asfalto, poco antes del tramo de "huertos", hice un recto contra una valla de hierro porque iba sin freno trasero y el delantero era insuficiente para reducir la velocidad. Resultado: el meñique un pelín aplastado entre la valla y mi manillar. Mala suerte pero, en realidad, me la había jugado todo el día y tarde o temprano tenía que pasar.

Bajamos el último tramo con salida al parking y directos a la tienda donde estuvimos hablando con uno de los dependientes mientras dejábamos en la calle bicis y protecciones para darles con la manguera. Le insistí en que los frenos seguían fallando, por eso de que nadie se matara con ella y los repararan, y los probó allí mientras hablábamos y nos quitábamos el peto hasta fallarle a él. El dependiente recordaba mi comentario sobre el descenso de la MegaAvalanche esa y nos contó que él competía desde hacía 20años y que la bajaba en 5m30s y que los profesionales le sacaban un minuto. ¡¡QUE CABRONES TODOS!! El uno y los otros.

Pagamos todo lo que hubo que pagar y nos dirijimos hacia el restaurante al que el resto del grupo dijo que iría a comer. O tardaron mucho en servirles o nosotros fuimos muy rápidos porque todavía estaban comiendo. Eso sí, Chema y Troquel (con ciertos alaridos según contaban) se habían duchado con una manguera de agua fría que allí había. Comimos unos bocatas, tomamos una maravillosamente fresca jarra de cerveza y nos dispusimos para la vuelta.

Como Alfonso, Fernando y yo íbamos llenos de barro (no veas cómo dejamos las sillas del restaurante), Fernando acercó el coche porque en ese momento llovía copiósamente y nos cambiamos de ropa en los servicios. Terminado el episodio, iniciamos la vuelta en los mismos coches que habíamos ido no sin dejar de intentar devolver la misma broma en los túneles sin éxito. Como nosotros llevábamos a Jorge a Barcelona y Karlitos a Ceporrillo a Santaco, paramos en una gasolinera llegando a Tarrasa para despedirnos unos de otros. Aún nos cruzamos en la entrada de la Meridiana pero creo que ellos no nos vieron a nosotros.

Ya en Mollet, Jua y yo cogimos nuestros trastos y nos despedimos de Fernando. Le apetecía venirse con nosotros a cenar pero le habían llamado durante el viaje y le estaban esperando en casa con la cena hecha. Fuimos a comer un Durum frente al polideportivo donde, mientras nos sentábamos, recibí un mensaje de Piecitos interesándose por la jornada. Yo le contesté que se viniera a cenar y ¡qué coincidencia! en ese momento llegaba con su mujer a cenar allí. Cenamos y charlamos sobre varios temas hasta que nos fuimos todos a dormir.




Clip Karlos

Video Karlos (Largometraje)

Llegar y cagarla

Exta SI que SI

Exta TAMBIEN



















































17 comentaris:

CEPORRILLO ha dit...

La ostia que dos dias mas buenos he pasado!!!....sin bici y con bici!!....menuda pandilla de amigos habeis forjado...que envidia sana.

La pasion por la bici que demostrais.....la pasion por la amistad que derrochais...si alguien tenia el mas minimo problema ya estaban todo el resto de Peña Panazetas alrededor echando una mano....me recordaba a un cambio de ruedas en la formula uno.

Con vosotros da gusto ir a la montaña.

Con esta filosofia que teneis en el grupo , iros preparando porque vuestras salidas van a ser de 100 o mas amigos...jajaja.

Un abrazo...no voy a dejar que me olvideis....soy muy pesao con la buena gente.

Un fuerte abrazo.

Zezu ha dit...

Un buen día rodeado de buena gente. Id tomando vitaminas porque la crónica va a ser un poco larga.

PD: mira que fallar en el cable AMARILLO. Para un panZeta es un error de embergadura. ¡NENAZAS!

Fernando ha dit...

Pues si, que dos dias mas buenos. Aunque hubo momentos malos, como el radar del tunel (capullazos, capullazos !!) o el puto malestar que tenía, ahora solo recuerdo lo bueno: uaaaaa!! Cómo no volver!!
Que bicis tan diferentes a las nuestras, parece que sabes con ellas.
Para el resto: muy bien toda la penya, ibamos los nueve en grupo y algunos probando cositas...
Cepo, al contrario, gracias por adaptarte al grupo y aunque no somos rencorosos eso de la pista negra te lo vas a oir mucho, mucho, mucho, je, je...

Ramboelendurero ha dit...

!Estoy deseando ver los vídeos! Pocas veces he visto cansado a Fernando y en una foto parece exhausto (malestar por enfermedad?). Vallnord es muy exigente y eso que las subidas son con telecabina.

Menudos 2 días habéis tenido que pasar, son esas cosas que debes hacer una vez al año si es posible porque valen la pena.

Como dirían en Airbag "Profesional.. muy profesional"..

Ruben ha dit...

Como me alegro de k lo pasarais en grande a pesar de los contratiempos ,me gusta mucho la foto de troquel tumbado en la cama con el casco puesto jajaja tas zumbao,k cabroncete Ceporrillo metiendoos en lo peor nada mas empezar jajaja...ahora ya sabeis lo k tragan esas bicis lo malo es cuando luego cojes la tuya buaaaaaaaa....yo quiero una jajaja,Zezu ya no hacen falta videos jejeje.

Karlos ha dit...

Buena crónica Zezu que me he leído en compañía de mis agujetas que no se separan de mi ni un minuto.

Tengo que corregir dos cosas:
La primera, es que me equivoqué yo en el desvío, no Alfonso y la segunda es que lo del flash en el tunel fue idea mía XD. Je je.

Fue un día genial. Para rematar hubiera molao que hubieran venido Rubén, Rambo, DH, etc, etc...

Felicitar a Fernando que ha organizado la salida. Chapó nen. Creo que si no es por el todavía estamos liaos.

Ceporrillo, te perdono lo de la World Cup si nos acompañas otra vez a Vallnord. Je je.
Me preocupaba un poco que te sintieras cortao con tantos garrulos pero has aguantao el tipo y con nota.

Resumiendo que esto hay que repetirlo.

Un saludo.

Fernando ha dit...

Gracias reporteros por las fotos y gracias al que se ha tomado la molestia de editar la entrada y agruparlas.
Zeze, tienes toda la razón, leyendo la crónica he revivido la jornada y la he vuelto a disfrutar, gracias tio, eso es mucho.
El video 1 esta muy bien. Me gustan los detalles de edición y el estilo serie documental, porque sale un poco de todo lo que iba pasando (incluso la tienda), como también la censura para "no acomplejarnos", ¿eh?, si con un pixel te bastaba!!
Me gustaria que en una proxima ocasión lo pudieramos montar para que vinieran todos los panZetas: tantos buenos ratos pedaleando juntos se merecen estas fiestas.

MARUJAMAN ha dit...

joder me parece que estoy cansado y mañana tendré agujetas del realismo que me he calzado leyendo tu crónica Zezu eres el puto amo encadenando palabras palabras

MARUJAMAN ha dit...

y mas palabras ja ja ja

CEPORRILLO ha dit...

Menuda cronica Zezu!!!...solo se te ha olvidado un detalle....que el Chema y yo ganamos el partido al futbolin...jejeje.

Fuera bromas...si que es una pena que cierren tran pronto los garitos en Vallnord porque yo estaba muy agusto en el ambiente de cachondeo y buen rollo que llevais...me hubiera echado un par mas de pelotazos lo menos con vosotros.

Pero por otra parte tambien vino bien para estar todos el dia siguiente a las 8 en punto desayunando biem frescos todos juntos....que ganas habia de empezar!!.

Menudo cabreo llevabas Zezu!!!...jajaja...has sacao pretroleo de esta primera bajada....pero a parte de mi despiste...esas pasarelas y puentes habia que hacerlos mas tarde o mas temprano...osea que de esa negra no nos ibamos a escapar!!!....jajaja.

Venga haber si en los otros videos se ve un poco mas de flow!!.

Zezu ha dit...

¿Se nota mucho que odio el barro? No te preocupes Ceporrillo que no era contigo. En cuanto hay barro me cabreo (soy muy limpio yo jejeje) pero luego se me olvida en cuanto empieza la diversión.

La confluencia de barro, ostias caminando y la imposibilidad de subirse a la bici con garantías me enervaron pero ¿quién se acuerda de eso?

Subí todo lo filmado para revivir hasta lo malo porque, pasado el tiempo, hasta resulta gracioso.

chema ha dit...

Lastima k este vallnord tan lejos y cueste tanta pasta por k estas experincias de despilfarro de adrenalina habria k repetirlas cada finde y mas en tan buena compañia,la cronica es un poco corta(jiji) pero muy buena espero k los videos sean solo la mitad de buenos.

CEPORRILLO ha dit...

Oleeee!!....ahora si..en los videos 2 y 3 de Zezu y en el de Karlos si que se ha visto mucho "Flow"....bajando del tiron todos juntos a toda leche y sin casi parar por el disfrute y tirandole a todo lo que nos encontrabamos.

Un dia cojonudo si señor......ojala lo repitais pronto.

Zezu ha dit...

Karlitos, me ha gustado mucho tu video completo. Tiene tomas muy buenas y no veas ¡que ostia te pegaste! Me alegro de que no te hicieras nada.

Pero...hacer largometrajes repitiendo escenas es trampa. JEJEJE

Karlos ha dit...

Osti tu, he repetido un video? Puede ser porque tenía un follón que pá qué y no lo revisé. XDDDD

Gracias a todos por por comentarios. Se agradecen después del esfuerzo de colgar los vídeos, fotos y crónicas.

Nos vemos el domingo.

CEPORRILLO ha dit...

Buen largometraje Karlos!!!....sin maquillajes....este es de los videos que uno suele recordar para calentar motores cuando vuelves a Vallnord...no te has dejado nada.

Me ha recordado hasta el cansancio que tenia....una retirada a tiempo es una victoria....yo lo tube igual de claro que tu y la comida que nos pegamos en plan super relax en casa Cedric Gracia fue la guinda a un dia cojonudo.

Buen recuerdo habeis dejado amigos.

Un abrazote...este finde toca La Molina...haber si os animais alguno!!!.

troquel ha dit...

ANTES DE NADA AGRADECER A LA PLANIFICACIÓN.y A TODOS LOS QUE DIERON SU GRANITO DE ARENA PARA QUE ESTO FUERA POSIBLE Y A LOS REPORTEROS YA QUE ES NUESTRO RECUERDOS PARA EL DIA DE MAÑANA QUE ORGULLOSO PODER MOSTRAR ESTO A NUESTROS NIETOS JEJEJE .
COMO EXPERIENCIA LA MEJOR QUE TENIDO SOBRE LA BICI LASTIMA A MI CAIDA QUE ME ACOJONE Y TUBE QUE BAJAR EL RITMO PERO DESPUES DE VER LOS VIDEOS HE PODIDO VER LAS CAIDAS DE VARIOS POR SUERTE SIN CONSECUENCIAS .
espero volver pronto con vosotros ya que vallnord sin vuestra compañia es una caca jejejje
ceporrillo, espero que lo pases bien y si grabas algo ya sabes danos el link