11/04/2013 Otra vez en mi territorio !!!

Hola Companys us deixo les dades de la sortida que hem fet pels voltants del Puiggracios i St. Cristòfol.

Aqui el Wikiloc < http://ca.wikiloc.com/wikiloc/view.do?id=4277300 >

Vídeo

Cronica Zezu

Otra epopeya intersemanal que disfrutamos mucho. Fué dura pero divertida y la única nota negativa, aparte del canguelo puntual, fué la caída de Sergio en una zona dura que provocó rascadas y moratones de consideración además de la rotura de su casco. Recupérate pronto compañero.

Salimos en coche, Marc desde su casa, Sergio de la suya y Alfonso y yo (Zezu) con Fernando. Llegamos rápidamente a LaGarriga, el punto de reunión pactado, no sin hacer gala el conductor de una de sus habilidades: perderse. Está claro que domina tanto el GPS del coche como el de la bicicleta. Una llamadita a Marc y nos encontramos en el polígono donde Troquel y Alfonso trabajan. Propuse llamar a Troquel, que en ese momento estaba pringando, para que saludara por la ventana porque pasamos por su puerta pero consideramos que era demasiado cruel.

Tras cruzar todo el pueblo, comenzamos a subir hasta el punto de avituallamiento de la otra vez. En esta ocasión por otra pista más llevadera. No estaba resentido de la salida del martes pero pronto me cansé, siempre me canso de subir, lo que no me impidió ir en el grupo de cabeza. Fernando, todavía haciendo la digestión (todos en realidad), nos perdonó la vida y subía a un ritmo soportable aunque Alfonso fué a más y, al PuigGraciós, llegó el primero y me pareció que Fernando no podía cogerlo. Pero esos detalles luego.

Tras largo sufrimiento, alcanzamos el punto donde comenzaba la primera trialera. Paramos a beber, hacernos la foto de grupo y ponernos protecciones. La mayor dificultad del primer tramo es su estrechez y el riesgo de caer por la ladera. Que no es poco. Yo me puse el último, ya que era el cámara oficial de la salida, y les dije que iría cambiando de posición para filmar a todo el mundo. Sergio no terminaba de cogerle el tacto a los frenos y lo ví patinar mucho en ese tramo aunque la verdad es que daba gusto verle (a los otros no los ví) tomar las curvas peraltadas de la parte central. Bajamos bastante más rápido que en la salida de la peña. En general, todos los descensos fueron muy rápidos.

Llegamos a la pista y nos tiramos hacia la segunda trialera. Es una pena lo que hay que subir para la altura que se desperdicia por la pista. Entraron directamente sin parar y con más flow a medida que pasaba el tiempo. Sólo antes de la "gran rampa" hubo una pequeña retención pero sin llegar a poner pié en tierra. A mí me asustó ver cómo Alfonso zigzagueaba al bajar llegando a cruzar un poco al final de la rampa pero el tiempo pasaba y me tiré con intención de pillarlos de nuevo cosa ya imposible. Decían abajo que muy bien pero la marca en el suelo de arrastrar las ruedas delataba la poca adherencia del firme.

Ya en la pista, nos dirigimos a por la tercera. Fernando ya había superado unos metros la entrada de la trialera y entró Marc el primero seguido de Alfonso, Sergio, Fernando y yo último filmándole. Sesión de patinaje continua puesto que el firme estaba muy suelto y amenizado por un parón en el mismo punto donde lo hicimos Piecitos, DH y yo. Igual que la otra vez me costó esquivar y parar (un árbol caido se encargó de este punto).

Como Sergio no se decidía a arrancar, Frenando salió delante y yo detrás de él. La verdad es que la pendiente es muy grande y el firme suelto junto a piedras y raíces obligan a echarle pelotas. Bajamos bastante bien hasta el escalón de la raíz donde Frenando hizo un extraño al caer y jugó a fútbol con una piedra lo que me hizo parar a mí antes de dicho escalón y ya bajé caminando. Aprovechando que estaba parado esperé a Sergio que venía más atrás y filmarle a él. Como también hizo un extraño en un escalón terminé pasando delante aunque también acabé cayendo (bien) de la bici cuando la rueda delantera cogió una piedra y arbolito que me sacaron de la trazada. Nuevo cambio de posiciones en el tramo final que duraría poco porque de nuevo pasé a Sergio en la última rampa. Desde abajo nuestros compañeros ya nos llamaban, no tanto preocupados por nosotros como excitados por el descenso, y contestamos con respectivos alaridos.

Abajo comentarios de la jugada y pista hacia abajo. Marc ya iba como una moto, se dió cuenta de un corriolcito junto a una torre de alta tensión y le faltó tiempo para tirarse. Yo bajé por la pista para filmar desde abajo a Frenando y Alfonso que también la hicieron. Luego la locura de pista a toda máquina donde, como siempre, basta un par de segundos para perder a la peña.

Una vez en el pueblo tomamos el sendero paralelo al río. Un tramo bonito y divertido por las raíces y escalones que vamos encontrando...y fresquito. La verdad es que en esta segunda pendiente no lo acusé tanto pero el principio de la ruta, en la otra vertiente, el calor era intenso y se agradecían los momentos de sombra y brisa. Llegamos a la casa del perro perseguidor de ciclistas y pasamos despacito pero sin parar. Estaba allí el dueño y le saludamos educada-mente sin perder de vista al chucho.

De nuevo tramo de pista ascendente. Aunque comenzamos subiendo Sergio y yo, pronto Fernando y Alfonso nos alcanzaron. Sergio se quedó con Marc, que es el que más sufrió en los tramos de pista, y yo aguanté poco rato con Frenando que salió a la "caza" de Alfonso que iba adelantado. El iba tranquilo pero yo no podía incrementar el esfuerzo y no me molesté en intentarlo. De todos modos, ví como Frenando alcanzó a Alfonso y lo volvió a perder. Al cabo de unos minutos se repitió el episodio y me dió la impresión de que Frenando no le podía seguir el ritmo a Alfonso que está fuerte como un toro y, según nos comentó en el coche, incluso se está alimentando para la próxima carrera de LosMonegros.

Me quedé solo y veía lejos a los primeros y no veía a los últimos por lo que me dediqué a pedalear tranquilamente hasta alcanzar a unos u otros como así ocurrió 500m más allá. Tras reagruparnos, bajamos un tramo rápido de pista para volver a subir después. Alfonso proponía otra pista lateral en la que, según dijo, no se pierde altura pero optamos por ir a lo conocido. Llegamos a la zona de sendero roto y continuó la tortura. Es mucho más ameno por sendero roto pero eran muchos los Km acumulados y resultaba demasiado duro subir a ritmo. Con dificultad llegué hasta el punto donde la última vez cruzamos unos niños que apuntaban maneras bajando pero allí tuve que parar porque no podía más. Sin embargo, Alfonso y luego Frenando subieron el rampón sin parar.

No sé si consiguieron superar el tramo de surcos. Nosotros no y lo he omitido del video para que no fuera tan largo. Más después de saber que algunos no ven los vídeos completos sino sólo a trozos (perdonad que no lo comprenda). Llegamos a la masía que hay debajo de la torre del PuigGraciós y, tras una breve parada, continuamos por un sendero muy roto y con excesiva vegetación que nos obligaron a caminar unos metros que nos llevaron junto a la torre. Allí bebimos, algunos rellenaron sus camelback y comenzamos a bajar.

Envenenado por la velocidad, Frenando se tiraba por el sendero que solemos hacer con la peña pero con una docena de gritos conseguimos que volviera "al buen camino". Varios cientos de metros más allá llegamos al otro sendero/trialera prevista. Nada técnico y de mucha velocidad que nos "envenenaba" cada vez más. Me puse último de nuevo con intención de cambiar de posición en los cambios por pista o cuando pudiera.

Bajamos la primera a saco. Yo incluso adelanté a Alfonso porque veía que bajaba más rápido que él pero me tiré a la pista y resultó que no era por allí. En la segunda, más velocidad, saltos y diversión hasta que llegó el punto fatídico. Yo iba mirando las evoluciones de Alfonso que ya siempre "adorna" los saltos y no me dí cuenta de que Sergio, con una maniobra similar, había caído poco más allá. El suelo era granito y, aunque liso, era un sitio duro para caer. Resultado: rascadas en codos, costillas, cadera y el casco roto. Larga parada para restrablecerse y poner un vendaje (ves Rabanín como Sergio es más agradecido que tú -jejeje-).

A partir de allí, pensé, bajaríamos el ritmo pero no fué así. Le iba diciendo a Marc que Sergio, como las personas normales entre las que no se encuentra Rabanín, iría más lento el resto de la ruta cuando, de repente, le veo dar un enorme salto en un cambio de rasante. "Retiro lo dicho" le dije a Marc.

Tras un pequeño lío en la pista (afortunadamente Alfonso se dió cuenta y había más de un GPS) escalamos un pequeño tramo para coger la n-ésima trialera. También la habíamos hecho antes con la peña y, tal vez por eso, bajamos rapidísimo. Sergio con algo más de prudencia que nosotros cuatro que íbamos aprovechando el miniperalte de cada surco. En el corte rocoso, donde el agua nos corta siempre el rollo, paramos y reagrupamos para continuar ese tramo horizontal hasta la siguiente. 

Sergio decía que estaba bien y que continuáramos. Simplemente, iba resentido del fuerte golpe que había recibido. Llegamos a un sendero llano y Frenando decía de ir tranquilo pero le dije que Sergio iba bien y que podía desmandarse. Le faltó tiempo, al poco empezó a pedalear con fuerza y me costó alcanzarle para filmar su flow...y cuando lo hice tuvimos que parar por encontrar a unos peatones. 

Y de una trialera a otra. Bueno, un sendero rápido y muy largo que nos llevó a una zona donde hacían moto-cross  Bajamos por una rampa que terminaba en otra pequeña de subida y salías saltando. Continuamos por una pista muy rota al principio y ya encaramos el regreso. Aún bajando hicimos otro sendero rápido en el que nos desbocamos una vez más. En la salida del mismo había un gran surco y Alfonso apenas pudo salir de él controladamente por la velocidad y ángulo de entrada. 

Contentos de la sesión de trialeras encaminamos hacia los coches y aún tomamos dos tramos más: uno antes de L'Ametlla y otro después que nos llevaría hasta el polígono y en el que también alcanzamos un buen ritmo a pesar de tener que pedalear. Un día completo como pocos.